En este fragmento el tema que se presenta es la sensación de estar en un lugar extraño y de sentirse incómodo por parte de Felipe. Está dividido en dos apartados: el primero trata sobre el reconocimiento del lugar (líneas 1 a 26) seguido del segundo subtema que es el encuentro con Aura (líneas 27 a 33). Los personajes presentes en esta parte del libro son Felipe Montero y Aura. El tipo de narrador es uno en segunda persona, utilizando el estilo indirecto, refiriéndose a que es la conciencia del protagonista la que le habla a sí mismo.
Análisis por verso:
Desde la primera línea, el protagonista se encuentra revisando la habitación en la que se aloja, encontrando un baño tras cruzar una puerta. Al ingresar al baño se da cuenta de lo que hay adentro, de la antigüedad del baño, describiéndolo detalladamente y refiriéndose a él como uno pasado de moda y mencionando que los objetos que se encuentran en este son muy antiguos que son poco comunes hoy en día. Luego, menciona estar observándose a sí mismo en un espejo de nogal, reflejándose la sorpresa que tiene Felipe al ver tanta antigüedad, ya que todo lo que ve, lo describe de manera muy detallada. Continuando, Felipe se describe a sí mismo mientras se mira en el espejo; se presenta un hipérbole en la línea 5 (“Mueves tus cejas pobladas”) exagerando acerca del grosor de sus cejas; después menciona tener la boca larga y gruesa, expresión que se relaciona con estar malhumorado o triste (tener una “cara larga”). Al estar frente al espejo, lo llena de vaho, aliento que sale de su boca empañando el cristal; el vaho está fuertemente relacionado al frío presente, y este frío se conecta a lo que él siente estando adentro de una casa oscura y silenciosa (sensación de desconfianza).
No comments:
Post a Comment